martes, 25 de noviembre de 2014

Christian Tomás Colón Garnica

Christian Tomás Colón Garnica, de 18 años de Tlacolula de Matamoros, Oaxaca. 

    Su papá viajo desde su tierra apenas se denunció el rapto de los 43 jóvenes normalistas.

“Yo soy jornalero, gano 600 pesos semanal, máximo, y eso cuando hay, porque a veces no hay trabajo. 

Mi muchacho quiere ser maestro esa es la profesión que él quiere, pero lo frenaron, lo detuvieron…

¡¿Qué vamos a hacer?!”






"Los Otros Amores"

Xilografia/papel deponte
65 x 110 cm


Mujer-es que existen RESISTIENDO, luchando...


***...Es tan hermosa una mujer de pie, que da escalofríos el sólo mirarla.***

Y escuchar es eso, aprender a mirar…
Salud a su no tener miedo.
Salud a la valentía que nos contagian, a la convicción que nos transmiten de que si no hacemos nada para cambiar este sistema somos cómplices de él.
SCIM










Impresa en Taller Rino Magenta (Toluca, Edo. Méx)

Un agradecimiento especial a Ricardo Sanabria por el Apoyo.

martes, 11 de noviembre de 2014

NUESTRA RABÍA SERÁ SU PESADILLA

¡¡ VIVOS SE LOS LLEVARON !!

¡¡ VIVOS LOS QUEREMOS !!


Israel ISK. STENCIL



Noviembre 2014.

Edición: Marco Yael C. Enguilo

Non Servium: TORPEDO

Aprender a desprenderse



"EL AMOR SEGÚN EL ANDULIO"
SCI Marcos (+)
Agosto-septiembre 2006.



(...)

Esto que les cuento fue hace más de once años. Ahora la Rosita ya debe estar crecida.

Tal vez el Andulio no le entregó la carta.

O tal vez sí.
O tal vez el Andulio le va a entregar la carta todavía.

Tal vez el Andulio y la Rosita, bajo el techo de esas letras, encontrarán sus cuerpos y se encontrarán una madrugada. Tal vez un relámpago recorrerá sus pieles. Tal vez sus suspiros renombrarán cada parte nueva que nazca de las caricias.
O tal vez no.

Tal vez son otros los ojos que desvelan al Andulio, otras las piernas que se enredan con las suyas, otra la humedad que sediento bebe.
Tal vez es otra la mano que recorre la geografía de la Rosita, otro el abrazo que ciñe su cintura, otro el cuerpo que monta hasta el dulce cansancio.

O tal vez el amor, ese impertinente, acecha aún en la sombra.

Y tal vez el Andresito encontró por fin un hueso de monstro, y se hizo una espada mágica y ahora la blande desafiando al poderoso, como de por sí se alzan las rebeldías en la Otra Campaña, en todos los rincones de México… y en tierras zapatistas, en las montañas del Sureste Mexicano.

Tal vez…